En este contexto difícil e incierto que atraviesan la Argentina y el mundo, la Biblioteca Nacional permanece cerrada temporariamente como ocurrió con muchas bibliotecas del mundo, obligadas por la pandemia y comprometidas, como el resto de la sociedad, a priorizar el cuidado de la vida de la gente y contribuir a evitar la propagación del coronavirus.

La Biblioteca sigue cerrada, pero está muy activa. Como institución guardiana y difusora del patrimonio bibliográfico en sus distintos soportes, principalmente de producción nacional, sigue cumpliendo con su importante rol. Continúa preservando y administrando de modo virtual y remoto a sus lectores, investigadores e interesados en general, documentos e información propia y de procedencia federal y universal. Conecta a usuarios del mundo y especialmente de nuestro país con los recursos de los que dispone y con servicios y actividades adaptados a las limitaciones actuales.

En la Biblioteca Nacional se está trabajando intensivamente en la planificación y elaboración de proyectos para cuando se vuelva a una “nueva normalidad”, la que deseamos que regrese en un corto plazo. En tal sentido, se están generando los protocolos específicos e imprescindibles, acordes para cada tarea, servicio o actividad, para evitar riesgos y garantizar el cuidado del personal y del público, previendo que el proceso de reapertura implique fases graduales, dosificadas, con las pautas que las circunstancias demanden y con tiempos reducidos de permanencia de los usuarios y de número de personas a la vez, reservas de turnos por adelantado, entre otras decisiones que permitan el acceso presencial del público, asegurando el distanciamiento social y las medidas preventivas respectivas.

Protocolos

MEDIDAS PREVENTIVAS GENERALES Y ESPECÍFICAS PARA EL PERÍODO DE AISLAMIENTO SOCIAL, PREVENTIVO Y OBLIGATORIO Y POSTERIOR AL MISMO

REINICIO DE SERVICIOS PRESENCIALES AL PÚBLICO

La Biblioteca Nacional permanece cerrada del 28 de marzo al 2 de abril (inclusive), debido a los feriados nacionales.