Fernando Ezequiel "Pino" Solanas (1936-2020)

“Llamen a ese muchacho”, dicen que dijo el general Perón en el exilio, después de ver La hora de los hornos, una película mítica que superaba las doce horas en su edición completa. Así viajó a Puerta de Hierro Solanas y filmó una enorme cantidad de horas a Perón, material que luego se convertiría en los documentales Argentina, mayo de 1969: los caminos de la liberación (1969), Perón, la revolución justicialista y Perón: actualización política y doctrinaria para la toma del poder (1971). El joven cineasta había abandonado su paso exitoso por la publicidad por el documentalismo militante. A partir de entonces, cine y política fueron las invariantes que acompañaron a Pino toda su vida. Diputado, senador, candidato a presidente, Pino Solanas falleció en París, donde había sido designado embajador argentino en la Unesco por el presidente Alberto Fernández, renunciando a la banca de diputado por la Ciudad de Buenos Aires, que había obtenido en las elecciones de 2019.

La memoria del regreso a la democracia en 1983, aparece ilustrada por sus obras de ficción: Tangos: el exilio de Gardel y Sur, películas emblemáticas de Solanas que concitaron públicos multitudinarios, afirmando una estética de sello propio. La larga experiencia política de Solanas, su exilio, los graves atentados que sufriera y su persistencia en la conformación de espacios de discusión, han quedado plasmados en su obra instalada en el nuevo siglo: Memoria del saqueo (2004), La dignidad de los nadies (2005) y Viaje a los pueblos fumigados (2018), entre otras, testimonio cabal de sus preocupaciones inclaudicables.

Aliado y enemistado con diversos compañeros de camino, en la política y en el cine, desaparece con Pino Solanas, además del entrañable luchador, un estilo de interpretar la mirada y construir un discurso cultural de absoluta originalidad.

La Biblioteca Nacional Mariano Moreno lamenta profundamente su fallecimiento y acompaña a su familia ante su dolorosa pérdida.